12/27/2010

The Amorous Ambassador.







Ya está. Ya hemos estrenado la obra, y el resultado no ha estado mal si tenemos en cuenta las dificultades que este año hemos tenido para conseguir llevar a buen puerto, el maravilloso mundo del teatro.
El público asistente, que por cierto llenaba la sala, salió muy contento felicitándonos por el trabajo que habíamos hecho, pero a nosotros los actores, que sabemos lo que podía haber sido y no fué, el resultado no nos dejó muy satisfechos.
Nunca el destino nos había puesto tantos impedimentos para representar una obra de teatro.
Cuando solo quedaba un mes para el estreno, todavía estábamos buscando a alguien que asumiera uno de los papeles mas complicados de esta obra porque conlleva muchas entradas y salidas del escenario así como muchos cambios de sexo...ahora soy Joe, ahora Josephine, ahora me pongo la peluca, ahora me la quito.
Cuando estábamos a punto de tirar la toalla, apareció él y nos solucionó el problema aunque seguía siendo muy complicado reunirnos los ocho para ensayar. De hecho, solo lo hicimos en una ocasión, dos días antes del estreno...¡¡Si señor!! ¡¡Con un par...!!
Eso hizo que el martes cuando salimos a escena, los nervios nos traicionaran y cometiéramos algunos fallos. No obstante tanto el público, mayoritariamente alumno, como los profesores, nos felicitaron sinceramente porque ellos no percibieron los errores que nosotros cometimos.
Creo que hace falta tenerlos muy bien puestos para, a pesar de las dificultades, ponernos el mundo por montera y seguir adelante con el proyecto. Estoy segura de que otros en nuestro lugar se hubieran dado por vencidos. Pero no es nuestro caso. Nosotros somos muy valientes o unos inconscientes. O simplemente es que tenemos un punto de locura que nos empujó a seguir adelante. Incluso el actor que hace un mes se unió a nosotros, se sorprendió cuando supo que la obra se iba a estrenar en navidad. Él es actor amateur desde hace diez años y nos dijo que en su grupo ensayaban de 7 a 8 meses antes del estreno. Sin embargo nosotros lo solucionamos en tres y ensayando solo un día por semana y para rizar el rizo...nunca estando todos juntos.
Por los años que llevo haciendo teatro y porque conozco a actores de otros grupos, sé que los errores y fallos durante la representación de una obra es de lo mas normal. Como se dice en tv, es lo que tiene el directo.
La parte positiva es el contacto directo con el público, eso para mí compensa la tensión, los nervios y las complicaciones que surgen en todas las actuaciones .
Como todos los años, quiero agradecer a todos mis compañeros el esfuerzo y las horas que han/ hemos invertido para poder actuar en la fecha prevista. El público se lo merecía.
Ahora toca, a la vuelta de estas minivacaciones navideñas volvernos a poner las pilas y preparar lo que será sin duda, un éxito en Zuera.
Chicos...Limelight volverá a triunfar allí.
Las fotos aquí.



12/05/2010

"Acuario" by Rupert.


El sábado 4 de diciembre mi amigo Rupert actuó para unos cuantos amigos. Rectifico, actuó para unas cuantas amigas. Cristina, Josita y yo acompañada de Luis nos reunimos con él en una especie de nave que está a las afueras de Zaragoza. Iba a decir, según una expresión muy de aquí, que la nave está " donde Cristo perdió la zapatilla", pero hacía tanto frío en esa nave que estoy segura de que ni Cristo hubiera ido allí, pero nosotras sí. Nosotras quisimos estar con él apoyándole en esta proyecto, porque sabíamos que merecía la pena ...y no nos defraudó.
Consciente del frío que allí hacía y para evitar que la audiencia se le congelara en pleno concierto, nos preparó cuatro sillas, dos delante y dos detrás con sendas mantas apoyadas en los respaldos para que nos envolviéramos en ellas y en el centro una estufa de butano, que solo se notaba su calor si pegabas a ella los pies y las manos.
Después de preparar la cámara de vídeo, empezó el espectáculo. Lo primero que nos dijo Rupert fué que teníamos que volver a ser adolescentes de 16 años y ver su actuación como si tuviéramos esa edad, ya que es el público al que va dirigido principalmente. Enseguida nos metimos en el papel, después de todo tampoco han pasado tantos años.
Delante de un telón con los doce signos del zodiaco y las constelaciones comenzó la charla sobre la era Acuario. Nos habló del daño que estamos haciendo al medioambiente con toda la basura que generamos. Cada hora, 4 especies de animales desaparecen. No podemos continuar en esta sociedad con este nivel de destrucción del planeta. Explicó una serie de coincidencias entre lo que algunos científicos han dicho y lo que algunas religiones dicen, que viene a ser que para 2012 habrá un cambio de Era y que algunos lo relacionan con el fin del mundo.
A pesar de que el contenido de la charla es muy interesante, para evitar que sea muy densa para los chavales se corta en varias ocasiones que él aprovecha para interpretar unas canciones- seis en concreto- todas ellas bastante conocidas aunque sean de los años 70.
Durante la explicación, Rupert hace algunas preguntas a la audiencia, interactuando con ella para que la charla, aunque sea durante unos momentos, se convierta en conversación.
La actuación dura algo mas de hora y media pero la verdad es que se hace muy amena y aunque sea en inglés es fácil de entender para cualquiera que tenga un conocimiento medio de ese idioma y además ayuda su buena pronunciación y entonación. Tengo que aclarar que Rupert es inglés, de ahí su buena pronunciación y entonación en ese idioma. Lo da todo cuando canta y cuando habla y eso se percibe.
Como colofón y para finalizar su actuación se desmelena y nos vuelve a hacer vibrar con su versión de "Satisfaction" como ya hizo en su obra de teatro "Drakula". De hecho ayer y a pesar del frío o quizá por eso, al empezar la canción, Cristina y yo en lugar de liarnos la manta a la cabeza como normalmente se dice, lo que hicimos fué despojarnos de ellas y empezar a bailar. Eso nos ayudó a entrar en calor.
Cuando acabó la canción, Luis apagó la cámara y dimos por finalizada la sesión. Recogimos un poco las cosas y nos fuimos a un bar para con el calor, en mi caso de un café con leche, darle a Rupert nuestra opinión de lo que habíamos visto, oído y vivido...por mi parte, pura Satisfaction.

Fotos, fotos y fotos...aquí.




















¿Quedamos en el Albergue?


Tanto tiempo sin ver a algunos de mis amigos, que cuando me dijeron que el sábado 27 podría encontrarme con ellos, no me lo pensé dos veces. Para hacerlo posible incluso cambié mi rutina del sábado, es decir la limpieza de ese día la pasé al viernes. Ya sé que puede parecer poco importante pero que a mí me supone un gran esfuerzo debido a mi mentalidad cuadriculada. Aún así, lo hice.
El lugar del encuentro fué el Albergue Municipal, que cuando mi pareja me dijo que iba a ser allí, lo primero que pensé fué que a nuestros amigos les debía de haber golpeado la crisis duramente si tenían que ir a comer y cenar al mismo lugar que los sin techo.
Me alegré cuando me aclaró que este albergue es una especie de hotel que se abrió con motivo de la Expo y que sirvió y sirve como alojamiento y que no tiene nada que ver con el otro albergue que dedica todos sus esfuerzos en ayudar a los pobres de la ciudad.
El edificio es muy acogedor y con un ambiente muy agradable que hace posible que siempre esté lleno de turistas especialmente jóvenes.
El motivo de elegir ese sitio era que allí se iba a celebrar un mercadillo o rastrillo tan de moda a medida que avanzan los días y se acerca la navidad. En él se podía encontrar todo tipo de ropa- yo me compré una camiseta por 2 euros- bolsos- me compré uno por 8 euros, gorros, bufandas, bisutería y demás complementos que eran verdaderas gangas.
A la misma vez que la gente compraba, se podía disfrutar de la música que iban poniendo nuestros amigos y los vídeos que mi pareja puso. Todos ellos tuvieron que repartirse el tiempo para poder aprovechar las más de 12 horas que iban a estar allí. Preciosa y variada música y hermosos vídeos.
Todo ello empezó a las 12 de la mañana y los primeros en llegar encontraron los mejores chollos en los puestos del mercadillo.
Cuando cambié mi rutina del sábado para poder llegar pronto al albergue, pensé que estaría bien darme una vuelta por la ciudad y pude descubrir que los sábados por la mañana hay otro mundo más allá de mi casa y que la gente que pasea ese día, tiene una expresión en la cara más relajada que la que tiene cualquier otro día de la semana. Me estoy planteando que lo que ese sábado era tan solo un cambio en mi vida, se convierta en rutina para poder tener libres las mañanas de ese día.
Volviendo al mercadillo diré que se mantuvo hasta pasadas las 10 de la noche aunque la música que ellos ponían se alargó toda la noche. De hecho, mi pareja y yo nos fuimos a la 1.30 de la madrugada pero otros se quedaron para seguir poniendo música y hacer que los clientes se sintieran más a gusto.
Tan a gusto como yo me sentí cuando os vi a todos vosotros. Ya sabeis quienes sois.
Aquí hay más fotos.