12/12/2011

Mensaje navideño 2011.

Tengo la suerte de tener una amiga con la que puedo compartir mi vena artística en el terreno musical. Las dos tenemos las mismas inquietudes en este campo y la necesidad de expresar esa creatividad que llevamos dentro. Juntas hemos grabado tres vídeos cantando sendas canciones y yo todavía me sigo enfrentando a ese momento con más nervios que ella, o quizá es que lo sabe disimular mejor que yo.
El último vídeo lo grabamos hace ya un par de meses y ante el "acoso" de nuestr@s fans (que l@s tenemos) hemos decidido volverlo a hacer.
La cercanía del año 2012 me hizo pensar que lo que deberíamos grabar en esta ocasión sería una felicitación para el nuevo año. Pensé en un diálogo cortito (que tampoco era cosa de escribir un telefilm) y nos lanzamos a la aventura.
El pasado jueves, mi amiga pasó a casa con parte del "atrezzo" para la grabación y me estoy refiriendo a una botella de cristal para licor y dos copas de coñac, todo muy sesentero. Yo preparé café y como si de dos amigas conversando mientras toman el café se tratara (en realidad se trataba de eso) empezó la grabación. Así, a pelo, sin ensayar ni nada. Eso es algo que pocas actrices se atreven a hacer ( a Dios gracias).
Los diálogos de ambas los había escrito en folios y los había pegado en la pared de enfrente para poderlos leer desde el sofá, sin caer en la cuenta de que las dos somos "un poco" miopes y apenas veíamos las letras.
A pesar de eso, seguimos adelante confiando en que después de haberlo leído un par de veces, lo habríamos memorizado. Cuatro letras borrosas no iban a detener toda la energía que las dos teníamos en ese momento.
Empezamos con nervios la grabación y ya desde el primer momento me di cuenta de que mi amiga iba a ir por libre a la hora de decir los diálogos que tanto me había costado escribir, ya que cambiaba algunos y en otros añadía palabras de su propia cosecha y aunque a mi eso de improvisar no me gusta (prefiero tenerlo todo atado y bien atado) no me importó que ella lo hiciera, incluso me divirtieron sus aportaciones.
La improvisación (eso es lo que tiene) provocó que se le trabara ligeramente la lengua, pero no nos reímos y como buenas profesionales que somos, seguimos con la grabación.
A mi se me olvidó por un momento, la marca del coñac que mi amiga me había dicho que dijera, aunque a los dos segundos, lo recordé y seguimos adelante.
La última parte del discurso en la que teníamos que desear feliz año 2012, resultó un auténtico desastre, divertido porque los errores se nos amontonaron, pero desastre al fin y al cabo. Una dijo "vosotros y vosotras" y la otra lo pronunció al revés. Luego una dijo "os deseamos" y otra no, porque de hecho, no estaba en el guión y por último una deseó "Feliz Año Nuevo" en vez de "Feliz 2012" que dijo la otra y que era lo que teníamos que decir.
Al terminar y viendo las meteduras de pata que habíamos hecho, nos echamos a reír con ganas y sugerimos repetirlo de nuevo. Limpiamos las copas de coñac y lo volvimos a grabar y esta vez salió perfecto.
Quiero aclarar que en ningún momento se nos ha pasado por la cabeza hacerle la competencia al discurso navideño que todos los años por estas fechas pronuncia el rey. Pero entre nosotras...el nuestro es mucho mejor. Seguro que no tiene la pomposidad que tiene el del rey, pero desde luego, es mucho más divertido.
A todo esto...¿os he dicho que mi amiga se llama Loli y que me lo paso genial con ella?

2 comentarios:

Pili Gasión dijo...

¡Hola guapa! Tenía muchas ganas de verte, pero estoy un poco baja de moral ¡qué novedad!... En fin, que me he acordado de tu blog y he pasado un ratico genial contigo. Un beso enorme.

Esther dijo...

Hola guapa, si leer el blog te ha hecho sonreir, me doy por satisfecha. Ya que sabes que puedes llamarme para hablar cuando quieras y para vernos también.