3/11/2010

¡Qué sueño tengo!

Son las 6 de la tarde y tengo que hacer grandes esfuerzos para mantener los ojos abiertos y es porque anoche tuve un encuentro en la 3º fase- digooo en la 3º hora- y no precisamente con un extraterrestre. Que no digo que eso no tenga su morbo, pero no, lo que pasó fué que cuando estaba poniendo en hora el despertador para que sonara por la mañana, ví que eran las 2'45 de la madrugada y no se me ocurrió otra cosa que preguntarme: "¿Y si llamo a mi prima?"
Dicho y hecho, que yo cuando tomo una decisión, allá que voy con ella.
Antes de que alguien diga que estoy loca por llamar a alguien a esas horas de la madrugada, os voy a aclarar que la persona a quién llamé fué a mi prima Pili. Y os preguntareis, ¿y qué tiene que ver que se llame Pili o sea tu prima para llamarle a esas horas?...Pues nada, no tiene que ver nada, ni con el nombre ni con la relación familiar, pero la cosa cambia si os digo que vive en Oklahoma (EEUU) y que cuando aquí son las 3 de la madrugada, allí son las 7 de la tarde del día anterior y es cuando ella llega a casa del trabajo.
Por eso, después de preparar el despertador y cuando íba a meterme en la cama, decidí volver al salón y llamarle.
Allí estaba yo, sentada en el sofá, en la soledad que proporcionan las tres de la madrugada y con los nervios a flor de piel porque no estoy acostumbrada a llamar al extranjero.
Me decido porque a esas horas no es cuestión de pensárselo mucho y empiezo a marcar un número de teléfono más largo de lo normal- es lo que tiene llamar al extranjero. Suena tres veces y al otro lado oigo una voz femenina que pregunta: "¿Yes?
Yo, contenta por haberme puesto en contacto con mi prima a la primera, le digo: "¡Hola Pili!"- "¿Sorry?" me contestan al otro lado. Pensando que las comunicaciones con el extranjero están fatal, vuelvo a repetir: "¡Hola Pili!".
"I don't know what you mean" me vuelve a decir la voz al otro lado del teléfono y entonces es cuando me doy cuenta de que "posiblemente" me haya equivocado de número.
Si esta conversación la hubiera tenido a las tres de la tarde, me hubiera dado cuenta antes de que no era su voz, pero es que a las tres de la madrugada...
Entonces saqué toda la artillería pesada e hice uso de mi conocimiento del inglés y me lancé a explicarle: "I'm sorry. I'm Spanish and I was trying to call my cousin Pili, who lives in Oklahoma", (un poco más y le cuento toda mi vida).
Ella entonces me responde: " Well, this is Oklahoma but she doesn't live here" .
-"Oh, thank you very much and sorry". Eso fué todo lo que se me ocurrió contestar.
Con sueño y preguntándome qué es lo que había podido pasar, miré en la pantalla del teléfono para averiguar qué había hecho mal y me dí cuenta de que había marcado un número de más. ¡Cómo no me íba a parecer largo el número!
Los nervios aumentaron y dudé de volver a intentarlo...pero lo hice. No íba a dejar que la conversación con una americana me quitara las ganas de hablar con mi prima.
El segundo intento fué un éxito y pudimos hablar y hablar y hablar. No sé durante cuánto tiempo estuvimos haciéndolo, pero sin duda se acercó a la hora.
Hablamos de muchas cosas. Hace casi dos años que no nos vemos porque nos separan muchos kilómetros y todo un océano.
Me lo pasé muy bién conversando con ella, pero esa larga conversación me produjo una gran excitación (no penseis mal, que os conozco) y cuando me metí en la cama, parte de esa conversación volvió a mi recuerdo y me desveló completamente. Pronto me dí cuenta de que íba a tener problemas para dormirme...¡y vaya si me costó!. Vuelta hacia la izquierda, vuelta hacia la derecha, bocarriba, bocabajo y los ojos tan abiertos como los ojos de Heidi y Marco.
Al final conseguí dormir, pero tan tarde que solo he dormido tres horas.
Aquí estoy yo ahora muerta de sueño, pero no puedo permitirme el lujo de dormir la siesta. No me preocupa mucho porque inevitablemente, dentro de unas horas llegará de nuevo la noche y podré dormir.
Ahora solo quiero darle las gracias a mi prima, sí a tí Pili que sé que casi todas las noches abres el blog para ver qué hay de nuevo.
Un beso y buenas noches.

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